Kamados
El kamado es un horno cerámico de origen japonés, alimentado por carbón y dotado de una peculiar forma ovoide que constituye uno de sus rasgos más singulares y una de las claves que se esconden detrás de su magnífico rendimiento, su eficiencia y su enorme versatilidad, que permite a los kamados cocinar a temperaturas muy elevadas o a temperaturas muy bajas durante un gran número de horas con una misma carga de carbón, asar, hornear, guisar, rostizar o ahumar ofreciendo unos resultados inigualables. Un auténtico todoterreno que en los últimos años está viviendo un extraordinario auge en el mundo occidental hasta el punto de formar parte inexcusable entre los utensilios de cocina de los chefs y restaurantes más prestigiosos del mundo, escuelas y facultades de gastronomía y, cada vez más, en hogares particulares.
Aunque se cree que los primeros kamados nacieron en China hace unos 3.000 años, sería en Japón donde siglos más tarde adoptaron su forma actual y desde donde se extendieron a Estados Unidos y otros países occidentales a la conclusión de la Segunda Guerra Mundial. De ahí que el término “kamado” con el que se conocen estos hornos cerámicos, pese a sus antecedentes chinos, sea una palabra japonesa que deriva del vocablo “mushikamado” y significa “horno”, “estufa” o "cocina". Dentro de los tres sistemas de escritura existentes en Japón, el carácter kanji para "kamado" sería 竈; el empleado en el silabario hiragana es か ま ど; y, finalmente, en el silabario katakana el término “kamado” se escribe カ マ ド. La equivalencia en romaji, que es como los japoneses denominan al alfabeto latino, sería “kamado”, que significa literalmente "lugar para el caldero", pero se ha convertido en la palabra que define de modo genérico a este tipo de recipientes de cocina.